Jean Herrera
La fotografía es un modo de escribir con luz
Esta vez, la sede de la conversión no fue alrededor de un café, sino el taller de fotografía. Lugar en el que Jean parece sentirse como pez en el agua. Alrededor de la conversación, dos cámaras antiguas, de esas que son joyas.
“Comencé a estudiar Artes Gráficas en la Escuela de Artes Visuales “Cristóbal Rojas” de Caracas. Pero cuando me gradué, me dediqué a la fotografía”. De inmediato aclara, “no se trata de un brinco entre lo uno y lo otro, porque ambas tareas se complementan”.
En 1999 conocía a Ramón Grandal, un fotógrafo cubano a quien considero mi maestro. Cuando vi sus fotografías, cambió la visión de lo que quería hacer. Me di cuenta de que la fotografía tenía más afinidad con mi modo de ver y de ser porque es más directa, más automática. Simplifica el movimiento, la composición, tu pensamiento. Todo en un clic.
En ese momento tenía 19 años. A esa edad estaba lleno de sueños…
Y se han hecho realidad…?
En cierta medida sí. He podido ver el fruto de mi trabajo, de mi esfuerzo. En estos días iba en el metro y vi a una persona que escribía una frase: Tener éxito no es obtener fama, sino llegar a realizar aquello que realmente deseas.
Y qué es lo que deseas?
Lo que deseo es expresarme, poder interpretar mi entorno y expresar esa cotidianidad.
Lo extraordinario de lo ordinario…?
Desde hace tiempo pienso que la fotografía no es sólo concretar una imagen sino una manera de escribir. La fotografía significa escribir con luz. Las imágenes reflejan una escritura que muestra aspectos de la vida que son muy subjetivos porque es el modo de pensar del fotógrafo.
Todos podemos estar en un mismo lugar viendo un suceso, un instante, pero todos vamos a tener particular de ese hecho. Y eso es lo que hace la fotografía.
La fotografía refleja eso maravilloso que está latente, pero que la gente muchas veces pasa por alto.
Sin embargo, es mentira que sólo los artistas ven cosas extraordinarias. La gente puede hacer de su vida una obra de arte. Herbert Ritch decía que el artista es una manera potencial de ser hombre y el hombre una manera de ser artista. Todo ser humano tiene una potencialidad artística, pero muchos no la desarrollan.
La foto preferida
Cada fotografía tiene una historia… Las imágenes de la exposición no son casuales.
Por ejemplo, la que está tomada en caño amarillo, recoge de alguna manera todos los elementos que tienen que ver con la fotografía: es reflejo, es luz, es tiempo, es fragmentación, es visión, es valores. Muestra muchas cosas porque la foto es un reflejo de la realidad.
Digital y tradicional…
Tradicional. Incluso cuando trabajo con digital, la uso manualmente. Con una cámara automática no tienes el control. La cámara es una extensión del ojo. A la cámara digital tú la configuras y funciona y puede darte resultados que tú no quieres. Con la cámara tradicional tú tienes el control totalmente.
El tipo de cámara que más me gusta es la Leika 35 mm, porque es más discreta, silenciosa, pequeña, compacta, transportable. Mi cámara es una leika modelo del 73, que por cierto fue un regalo que me hizo Ramón Grandal.
Entre color y blanco y negro?
Blanco y negro. Pienso que el color te distrae. Si la fotografía no es buena, desde el punto de vista de composición, etc, la gente se queda en lo formal del color. Te distrae de la idea que el fotógrafo quiso expresar. Con el blanco y negro estás obligado a precisar la idea. Te obliga a que analices más la imagen. El blanco y negro te lleva a la finalidad de la imagen, a su esencia. Para mi el color es más complicado…cuando lo trabajo, trato de que el color sea secundario.
Qué es para ti copiar…
El trabajo del fotógrafo no termina cuando presionas el obturador. Es un trabajo que se prolonga en el laboratorio. Tiene que ver con el lenguaje, es tu interpretación de la imagen. En el laboratorio es donde concreto la visión de lo que hago.
Exposiciones…
Ha habido dos muy significativas:
En 2006 “Pasajes de la ciudad”, fue una individual. Ese mismo año una colectiva promocionada por Magnum Fotos “Un mundo varios puntos de vista”, en el museo Alejandro Otero. Fui el fotógrafo más joven de la muestra y allí participaron artistas de gran renombre nacional e internacional.
Define la fotografía
Una escritura fotosensible capaz de retener el tiempo en un instante. En una palabra… vivir.
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“En la fotografía pasan cosas que no esperas, que te alegran”
Aaron Sosa: La fotografía es vida
Texto.-
Existe como una especie de cliché (o no tan cliché): el artista no sabe ni de tiempo y ni de espacio… Sin embargo, Aarón Sosa, fotógrafo, tiene muy bien claro y definido su tiempo y su espacio.
Llega a la cita puntualmente y su modus operandi es organizarse para hacer muchas cosas por la misma zona y así aprovechar cada minuto. “Vivo en Guarenas”, aclara y tengo que estudiar bien lo que voy a hacer durante el día para llegar a todo.
Es un joven artista de esos que uno catalogaría, además, como un gerente. Cuenta que estudió en la Escuela de Arte contemporáneo de Caracas. “Mi meta era ser diseñador gráfico…pero me enamoré de la fotografía”.
¿Y ese amor?
En año 97 estudié en la Escuela Técnica de Artes Visuales Cristóbal Rojas, tenía 17 años. El enamoramiento vino al principio por sentido práctico. Era más fácil tener una cámara que los equipos para diseño y fue cuando empecé a hacer fotografía. Luego me fue conquistando la idea de captar el espacio y el tiempo.
¿Y qué es la fotografía?
Es vida.
¿Y qué quedó del diseño?
El diseño gráfico me ayuda mucho: puedes tener una visión más amplia de la composición estética, del manejo de las texturas… el diseño ha sido un complemento para la creación.
¿Cómo se crea mejor, con una cámara analógica o con una digital?
Me eduqué con ambas técnicas. He trabajado con todo tipo de cámaras, desde Holga 120 s –y nos la muestra con todo orgullo- hasta las más sofisticadas. Pienso que quien hace la diferencia es quien crea, no la herramienta. Por ejemplo, si alguien pasa un mes observando sin salir de esta misma cuadra, pero ve con ojo artístico, puede sacar cosas maravillosas. Depende del ojo. La buena fotografía la hace el fotógrafo. Eso sí, no se puede negar que la fotografía digital añade versatilidad, agilidad.
¿Cómo es la mirada del fotógrafo?
Siempre respondo con algo que alguna vez escribí: se puede estar en donde están todos, y al mismo tiempo ver todo distinto, ver siempre más allá. Y es que hay cosas que existen, suceden cosas, pero son pocos los que perciben que esas cosas están allí. En la fotografía se trata de sensibilizarte ante eso, ante lo más simple. La fotografía es mi mundo paralelo.
¿Cómo encuadras tu modo de ver las cosas con el mensaje que acompaña la muestra de “Lo extraordinario de lo ordinario?
Lo que el fotógrafo hace en su día a día es lo que para san Josemaría es lo cotidiano, para él es la vida es lo cotidiano. El habla de que el hombre necesita estar en paz. Yo creo que el fotógrafo necesita también estar en paz, porque esa es la única manera de crear.
¿El corazón atormentado puede crear?
Sí, pero crea angustia. Yo creo que el mundo tiene suficientes defectos como para resaltarlos a través de la fotografía. Además, no todas las cosas son malas.
En los periódicos vemos a diario asesinatos, pobreza… muchas veces eso te obliga a ser amarillista. Pero mi trabajo es lo opuesto a eso. Yo quiero servir a través de la fotografía. Es por eso que en la medida que puedo dono mis imágenes a instituciones con fines nobles.
De la muestra, ¿cuál es tu foto preferida?
La que tomé en un colegio (de la serie Caracas 20x25). La tomé con una cámara que me dio problemas siempre. Trabajaba en el Ministerio de Educción. Recuerdo que hice la toma y me di cuenta de que había una especie de velo. Se ve que la cámara no obturó bien, no se abrió por completo. Pero cuando revelé la imagen, había una sorpresa. Allí estaba lo extraordinario. Es que en la fotografía pasan cosas que no esperas, que te sorprenden, que te alegran.
Termina nuestro café. La tarde es joven y el fotógrafo tiene varios planes. No es de extrañar. Trabaja como corresponsal para la agencia DPA, para la Agencia Inglesa Majoriy Word y para Orinoquiafotos. Además, dicta talleres de fotografía por su cuenta “Me gusta la enseñanza. Creo que hay que transmitir lo que uno sabe, porque eso puede servir a los demás y uno no se puede quedar con todo”, concluye.